El titular de Anses, Emilio Basavilbaso, indicó el 16 de febrero que “el esfuerzo que estamos haciendo para aumentar la protección social es real y se ve en los números”.
Las declaraciones de la Ministra Stanley, quien mencionó que “en 2015 se dieron de baja 168 mil pensiones con los mismos criterios que usamos hoy” evitan ahondar en razones y con ello, buscan responsabilizar al gobierno anterior de bajas en las pensiones no contributivas. Cuando se accede a los números la realidad es otra.
El Gobierno acaba de acordar con algunos Gobernadores el aval a la nueva fórmula de actualización previsional sumándole un adicional para las jubilaciones de menos de $10.000 y para los beneficiarios de la AUH. El diario Clarín indica que “el monto de la compensación tendrá tres variantes. Los jubilados que hicieron aportes cobrarán $750 por única vez, mientras que quienes se jubilaron sin aportes cobrarán $300. A su vez, los beneficiarios de AUH cobrarán $400”.
El poder adquisitivo de la Jubilación Mínima considerando el aumento de marzo de 2020 y la proyección de la inflación
A instancias de una serie de recomendaciones elaboradas desde el FMI, en diciembre de 2017 fue modificado el índice de actualización de las jubilaciones y AUH. Esto, sumado a la pérdida de poder adquisitivo experimentado por dichos ingresos aun con la fórmula anterior - en virtud del magro derrotero de la economía argentina (particularmente en 2016)- implicó un sensible perjuicio para los jubilados.
El año 2017 finalizó con la aprobación legislativa del cambio en la ley de movilidad jubilatoria. Desde el 2008, las jubilaciones y pensiones tenían por ley un incremento garantizado dos veces por año: en marzo y septiembre según un coeficiente que promediaba la variación de salarios de la economía con la variación de la recaudación tributaria semestral con un rezago de 6 a 12 meses. La nueva ley de movilidad jubilatoria impuso una serie de modificaciones.
El siguiente análisis tiene por objetivo estimar la evolución del poder adquisitivo de la jubilación mínima desde marzo de 2013 hasta febrero de 2018. Para tal estimación, se ha utilizado el índice de precios minoristas de la Ciudad de Buenos Aires, estimando la inflación de los meses de agosto de 2017 a enero de 2018 según el Relevamiento de Expectativas de Mercado del BCRA, y febrero de 2018 como promedio de las estimaciones de tales periodos.
El siguiente análisis tiene por objetivo estimar la evolución del poder adquisitivo de la jubilación mínima desde septiembre de 2014 hasta marzo de 2017. Para tal estimación, se ha utilizado el índice de precios minoristas de la Ciudad de Buenos Aires, estimando la inflación de los meses de febrero y marzo según el Relevamiento de Expectativas de Mercado del BCRA.
En virtud de que la propuesta oficial –y recientemente ratificada en el dictamen de Comisión del Senado- que implica actualizar las jubilaciones, las AUH y el salario familiar con la variación de precios, y del escaso efecto del “incentivo” por encima de la inflación propuesto (acotado a la evolución salarial en un 30%), en adelante, los jubilados, los beneficiarios de la AUH y del sistema de asignaciones familiares no podrán ganar poder adquisitivo sino que –cuanto mucho- podrán esperar a no reducir sus ingresos reales.
A mediados de abril de 2019, el Gobierno decidió relanzar los créditos Anses. Del mismo modo que en 2017, este relanzamiento se produce en el marco de una sensible caída del poder adquisitivo y en la previa del proceso electoral, lo que genera la pregunta que da sentido a este informe ¿Los créditos Anses apuntan a reactivar el consumo o su finalidad se acota al impacto que puedan tener en términos electorales?
Los tres jefes de los bloques que integran Cambiemos en la Cámara Baja (Elisa Carrió por la Coalición Cívica -ARI, Mario Negri por la UCR y Nicolás Massot por el PRO) redactaron en un comunicado su rotundo “apoyo al proyecto de reforma previsional", argumentando que “en 2018, con esta fórmula, las jubilaciones le van a ganar por alrededor de 5 puntos a la inflación”.
Las pensiones no contributivas fueron pensadas desde su origen para cubrir las contingencias sociales (de origen biológico, patológico o económico-social) de las personas que no cuentan con recursos o bienes suficientes para su subsistencia y la de su grupo familiar. Así entonces, desde su creación la Comisión Nacional de Pensiones gestionó las pensiones a la vejez, por invalidez y para las madres de 7 o más hijos, en carácter de derecho para aquellas personas que se encuentren en estado de vulnerabilidad social, sin amparo previsional o no contributivo, que no posean bienes, ingresos ni recursos que permitan su subsistencia y que no tengan parientes obligados legalmente a proporcionarle alimentos -o que, teniéndolos se encuentren impedidos para poder hacerlo-.
El gobierno prorrogó por tres años la moratoria previsional para las mujeres a través de la Resolución 158/2019 de ANSES. Pero esta medida no es universal, ya que no incluyó la prórroga de la fecha de corte que continúa en el año 2003. Esta fecha es la que limita temporalmente la posibilidad de declarar deuda por aportes, es decir, el límite para “comprar” años.