Apertura, desregulación y endeudamiento (no hay plan B)
La primera semana del 2017 vino acompañada de una serie de modificaciones en el esquema macroeconómico del país pero a su vez, y en mayor medida, por grandes acontecimientos en la escena económica internacional.
Cambian los instrumentos, sigue la bicicleta
El pasado martes 9 de enero, luego de una gran expectativa generada a partir de la modificación de la meta de inflación prevista para 2018, el BCRA resolvió una reducción cosmética de la tasa de política monetaria (el centro del corredor de pases a 7 días) de tan sólo 75 puntos básicos, ubicándola en un 28%.
Aquella revisión al alza de la meta de inflación para 2018, se dio en un marco de incumplimiento de la meta para 2017, en virtud de una inflación acumulada en el año pasado de 24,8% a nivel nacional y 25% en el GBA (INDEC-IPC), contrastante con únala meta fijada que tenía un piso de 12% y un techo del 17%. Es decir que la inflación observada más que duplicó el piso de la meta, superó en 5,8 puntos porcentuales al techo, y se suma al incumplimiento en 2016.
El costo de una bicicleta que no para de crecer
El pasado jueves 12 de octubre el INDEC informó que el IPC del mes de septiembre fue de 1,9% a nivel nacional y 2% en el GBA. Con estos resultados, en 9 meses de 2017 la inflación acumulada (17,6% nacional y 18% GBA) que informa el propio ente de estadísticas oficial ya superó el techo del 17% de la meta de inflación prevista por el BCRA para todo el año y puso en discusión la política impulsada por la autoridad monetaria bajo la presidencia de Federico Sturzenegger.
Fuga de capitales en el primer semestre de 2018
Autora: Magdalena Rúa.
La deuda en dólares más que duplica los compromisos “heredados”
Hace algunos días el actual Ministro de Finanzas, Luis Caputo, indicó: “tres de cada cuatro veces que hemos emitido deuda, ha sido para cancelar deuda". Estas declaraciones efectúan una doble operación. Por un lado, argumentan que el endeudamiento responde a una “pesada herencia” de elevados vencimientos y, por ende, el aumento de las obligaciones financieras resultaría ajeno al modelo económico que lo sustenta. Por otro, las declaraciones de Caputo omiten deliberadamente que, incluso en un contexto como el actual donde la baja en las tasas favorecería un roll-over de deuda, no hay ninguna necesidad de re-financiar la totalidad de los compromisos con nueva deuda. Incluso en las condiciones actuales del país sería posible sostener un proceso de desendeudamiento con utilización de reservas compuestas por dólares obtenidos por vías más genuinas (por ejemplo, el saldo comercial). Desde ya, esta última opción no es la adoptada por la gestión de Cambiemos.
La fuga de capitales en el primer semestre de 2017
En el informe anterior, correspondiente a los primeros cuatro meses de 2017, ya se advertía el importante incremento de la salida de divisas en el corriente año, acompañado por un proceso de fenomenal endeudamiento externo.
La fuga de capitales en los primeros cuatro meses de 2017
En el informe anterior correspondiente a la fuga de capitales en 2016 se advertía acerca del importante incremento de la salida de divisas acompañado de un proceso de creciente endeudamiento externo en el primer año de gestión de la Alianza Cambiemos. Durante todo el año 2016, la Formación de activos externos del Sector Privado No Financiero (FAE del SPNF) alcanzó los 9.951 millones de dólares, mostrando un fuerte crecimiento en relación con el año anterior.
La reciente suba del dólar en la plaza local: consecuencias del modelo
Las recientes intervenciones del Banco Central de la República Argentina – BCRA- con la venta de 1.471,7 millones de dólares en la plaza cambiaria el día 25 de abril, y otros 853 millones de dólares el 26 de abril –que arrojaron, sin embargo, un cierre del dólar minorista en alza a $20,837- colocaron en el centro de la escena el cíclico debate sobre las determinaciones del movimiento del tipo de cambio y, particularmente, sobre la problemática de la restricción externa en una economía periférica como la Argentina.
Panorama monetario: menos crédito pero con aumento de la rentabilidad de los bancos
Los episodios de volatilidad cambiaria experimentados en 2018 reconfiguraron el esquema de política monetaria. Si bien las tasas de interés previo al primer episodio en el mes de mayo distaban mucho de reflejar la velocidad de baja que mostraban los relevamientos de expectativas de mercado, podemos decir que se sostenían en niveles promedio estables, y que tras la adopción del régimen de agregados monetarios prácticamente se duplicarían. Tal es el caso de la tasa de política monetaria y la tasa BADLAR, que en promedio se ubicaban a mayo en 31% y 23%, para luego cerrar el año en torno al 50% y 60%, respectivamente. Todo esto en línea con un salto en el tipo de cambio de 100% en términos interanuales (1).
Revisionismo financiero: un análisis sobre las expectativas de los agentes financieros
Uno de los grandes pilares conceptuales de la campaña de Cambiemos fue el tan mentado retorno de la “confianza”, que entre otros aspectos permitiría reinsertar a Argentina en el mundo y recibir de esta forma, una consistente “lluvia de inversiones”. Finalmente, la llegada de inversiones significó sólo una sutil “garúa”, estrechamente relacionado con el negocio financiero garantizado por las altas tasas y el endeudamiento externo.