La fuga de capitales en los primeros cuatro meses de 2017
En el informe anterior correspondiente a la fuga de capitales en 2016 se advertía acerca del importante incremento de la salida de divisas acompañado de un proceso de creciente endeudamiento externo en el primer año de gestión de la Alianza Cambiemos. Durante todo el año 2016, la Formación de activos externos del Sector Privado No Financiero (FAE del SPNF) alcanzó los 9.951 millones de dólares, mostrando un fuerte crecimiento en relación con el año anterior.
En los primeros meses de 2017, los flujos mensuales de salidas netas de moneda extranjera se aceleraron aún más. Solamente en los primeros cuatro meses de 2017, la fuga de divisas alcanzó 5.650 millones de dólares, un 40% más que lo registrado en los mismos meses del año anterior. Aún mayor es su crecimiento en relación con el año 2015, teniendo en cuenta que la adquisición de moneda extranjera para la formación de activos externos en los primeros cuatro meses de 2017 resultó ser el doble de lo registrado en los mismos meses de aquel año.
El Gráfico N° 1 muestra el crecimiento de los flujos netos de salidas (egresos netos de ingresos) en el período que va desde diciembre de 2015 hasta la actualidad, en comparación con el período anterior. Allí se observa que, hasta noviembre de 2015, los flujos mensuales de salidas no superaban los 1.000 millones de dólares y, a partir de allí, se acercan a los 2.000 millones de dólares. Entre enero y noviembre de 2015, el promedio de salida mensual fue de 590 millones de dólares, mientras que entre diciembre de 2015 y abril de 2017 el promedio de salida mensual es de 1.037 millones de dólares, lo que indica un aumento del 75%.
Por otro lado, el Gráfico N° 2 muestra la formación de activos externos desagregada en ingresos y egresos. Ello da cuenta que los ingresos por ventas de moneda extranjera por parte del sector privado no financiero fueron significativamente inferiores a los egresos de divisas por compras de moneda extranjera a lo largo de todo el período, con la única excepción de diciembre de 2016. Cabe aclarar que la importante entrada de capitales registrada en dicho mes está vinculada directamente con el régimen de blanqueo de capitales (Ley 27.260, “Régimen de sinceramiento fiscal”) que implicó la repatriación de fondos para el pago del impuesto especial que estableció esa legislación, lo que resultó en una entrada neta de 2.015 millones de dólares en ese mes.
En este sentido, de no haber sido por el ingreso de aproximadamente 4.000 millones de dólares con motivo del blanqueo, la fuga de capitales del año 2016 habría sido de alrededor de 14.000 millones de dólares.
En el Gráfico N° 3 se puede observar que en los primeros meses de 2017, el ritmo de la fuga de capitales se aceleró fuertemente. En solo un cuatrimestre de 2017 la formación de activos externos alcanzó 5.650 millones de dólares (egresos netos de ingresos), aumentando en un 40% el ritmo de salida registrado en los mismos meses el año anterior, y duplicando los niveles de salida de los primeros cuatro meses del año 2015.
Finalmente, si se contempla en conjunto la formación de activos externos y la remisión de utilidades y dividendos, durante los primeros cuatro meses de 2017, la fuga de capitales bajo estos dos conceptos suma 6.115 millones de dólares, un monto prácticamente equivalente al total registrado entre enero y noviembre de 2015 (bajo la gestión de gobierno anterior), que fue de 6.734 millones de dólares (ver Gráfico N° 4).
Entre diciembre de 2015 y abril de 2017, el total fugado entre formación de activos externos y utilidades y dividendos alcanza 21.253 millones de dólares, lo que significa que en un plazo inferior al año y medio, bajo la nueva gestión económica, se ha fugado prácticamente la mitad del monto de las reservas internacionales del BCRA a la fecha (una cifra equivalente al 45% de 47.468 millones de dólares de reservas).
Es importante mencionar que esta formidable oferta de divisas es financiada mediante un proceso de indiscriminado endeudamiento externo, rasgo característico del modelo de acumulación asentado en la valorización financiera (Basualdo y Kulfas, 2002), que tiene su base en el endeudamiento externo, las altas tasas de interés que permiten el desarrollo de la “bicicleta financiera” y la imprescindible posterior fuga de divisas.
Conclusiones
- Entre diciembre de 2015 y abril de 2017, el total fugado entre formación de activos externos y utilidades y dividendos alcanza 21.253 millones de dólares, lo que significa que en un plazo inferior al año y medio, bajo la nueva gestión económica, se ha fugado prácticamente la mitad del monto de las reservas internacionales del BCRA a la fecha (una cifra equivalente al 45% de 47.468 millones de dólares de reservas).
- Durante todo el año 2016, la Formación de activos externos del Sector Privado No Financiero (FAE del SPNF) alcanzó los 9.951 millones de dólares, mostrando un fuerte crecimiento en relación con el año anterior.
- De no haber sido por el ingreso de aproximadamente 4.000 millones de dólares con motivo del blanqueo, la fuga de capitales del año 2016 habría sido de alrededor de 14.000 millones de dólares.
- En 2017 los flujos mensuales de salidas netas de moneda extranjera se aceleraron aún más. Solamente en los primeros cuatro meses de 2017, la fuga de divisas alcanzó 5.650 millones de dólares, un 40% más que lo registrado en los mismos meses del año anterior.
- Si miramos el promedio mensual de fuga, entre enero y noviembre de 2015 fue de 590 millones de dólares, mientras que entre diciembre de 2015 y abril de 2017 el promedio de salida mensual es de 1.037 millones de dólares, lo que indica un aumento del 75%.
Autora del informe
Magdalena Rúa, Equipo Monetario Financiero CEPA.