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Crisis económica local y global: ¿es la pandemia o la cuarentena?

Cuando parecía que algunos países habían logrado controlar al COVID 19, mostrando una curva descendente en la cantidad de casos, el rebrote actual en al menos una veintena de países demostró que la pandemia no tiene aún fecha de vencimiento. En ese mismo sentido, el impacto en materia económica no hace distinciones: al día de hoy, y en virtud de las últimas proyecciones del FMI, las caídas del producto en gran parte de los países rozan o superan los dos dígitos.

El presente informe recupera datos económicos a nivel global que permiten construir un mapa de las variables de actividad, producción industrial y desocupación en distintas partes del planeta. Al mismo tiempo, el cruce entre estos datos y el balance sanitario – a través de la cantidad de muertes en valores absolutos y por millón- permite extraer conclusiones relevantes.


1- La pandemia sigue, las proyecciones se corrigen

El Fondo Monetario Internacional en sus últimas proyecciones para el 2020 realizó correcciones (a la baja en los PBI´s de cada economía) que dan cuenta de la incertidumbre que reina en torno a los impactos de la pandemia en lo que refiere a las perspectivas de la economía mundial: una crisis como ninguna otra, una recuperación incierta.

Si bien en diversas latitudes e incluso en nuestro país reclaman definiciones de plazos de finalización de medidas de aislamiento, lo que se observa recientemente son rebrotes en los contagios, tal como describió el periódico británico The Guardian el pasado 25 de junio en su nota “Revealed: data shows 10 countries risking coronavirus second wave as lockdown relaxed”, basada en un tracker de políticas de aislamiento por COVID construido por la Universidad de Oxford.

El trabajo de The Guardian detalla que de los 45 países que han registrado más de 25.000 casos de coronavirus hasta la fecha del 25 de junio de 2020, en 21 se han relajado o flexibilizado el aislamiento y, de ellos, 10 están reportando un número cada vez mayor de casos de contagios por COVID 19. A saber: EEUU (+24,6% de casos por COVID en la semana previa al 25 de junio), Irán (que está teniendo su segundo pico), Alemania (+36,7%), Suiza (+15%) y Suecia (-11%), entre otros. En los países citados las restricciones se han relajado desde un 70% aproximado en mayo, hasta un 50% en junio. “Muchos países están reabriendo economías antes de cumplir con las recomendaciones de la OMS por los costos económicos que empiezan a tener”, señala incluso el artículo. En el mismo período Argentina muestra una situación compleja con +64,3% casos de contagios y restricciones a la circulación en torno al 90%, según el artículo mencionado.

A continuación relevamos datos en un panel de países seleccionados, en tres variables: PBI, producción industrial y desocupación.

Caídas del PBI por doquier: los datos del FMI

Según el FMI la economía global se contraerá por 5,2% con respecto al 2019 a pesar de las políticas para mitigar la recesión que puedan llegar a existir. En el caso de Argentina, se estima una caída anual de su PBI del 9,9%, pero a esta altura de la situación registra a la vez la menor cantidad de fallecidos por la pandemia. Los países con peores resultados económicos respecto de Argentina, son Italia y España (con proyección de -12,8% para ambos), Francia (-12,5%), México (-10,5%) y Reino Unido (-10,2%). La cantidad de muertes en estos países de gran caída de la actividad es también muy relevante: en Italia son 34 mil, en España se superan en 28 mil, en Francia superan las 29 mil, México registra más de 28 mil y Reino Unido más de 43 mil.  Desastre sanitario, desastre económico.

El cuadro 1 contiene la evolución del PBI del primer trimestre del 2020 respecto del trimestre anterior, la primera proyección del FMI realizada en un informe de abril y la segunda proyección (con correcciones a la baja en todos los países) realizada en junio del corriente año. Es relevante tener en cuenta a la hora de analizar estos datos que se trata de países que han tenido estrategias sanitarias disímiles en tanto, algunos establecieron cuarentenas tardías, otros tuvieron una política flexible desde el inicio y otros, como la Argentina, establecieron la cuarentena al inicio del brote.

Lo primero que puede observarse es el desplome producido en las principales economías europeas: a excepción de Alemania (2,2%) y el Reino Unido (2%), Francia, Italia y España tienen caídas superiores al 5% en el primer trimestre del 2020 y si observamos las proyecciones del FMI para fin de año el panorama no es demasiado alentador para los países europeos, ya que a excepción de Alemania (7,8%) todos los demás países seleccionados en este panel tienen una caída por encima del 10% en su PBI lo que habla de una contundente crisis económica durante todo el año para las principales economías europeas.

Al otro lado del mundo, en el continente donde se inició la pandemia, las cosas no son muy distintas. El cuadro 1 muestra las caídas del PBI en Corea del Sur (-1,3%) y China (-9,8%) durante el primer trimestre de 2020. La pronunciada caída del PBI chino probablemente tenga que ver por un lado con la estricta cuarentena, aislamiento y paralización de territorios enteros para frenar el avance del virus, y por otra parte por ser el país donde se originó el brote y haber estado afectado por el mismo durante el trimestre entero de medición del PBI.Las proyecciones del FMI son relativamente auspiciosas para China que tendrá un crecimiento del 1% para fin de año, pero no así para Japón (-5,8%) y Corea del Sur (-2,1%) quienes verán caer su economía para fin de año. El dato de relevancia para los países asiáticos es que, debido a las medidas sanitarias tomadas por sus gobiernos, tienen la pandemia relativamente bajo control y, en los casos de Japón y Corea, no reportan nuevos casos hace algunos meses, aunque las proyecciones son también pesimistas para ellos.

En América del Norte, Canadá registra un leve descenso del PBI durante el primer trimestre de 2020 (-0,4). En América Latina Argentina tiene el peor registro de caída de PBI durante el primer trimestre (-4,8%), seguido por Perú (-3,4%), México (-1,6%) y Uruguay (-1,4%). Si bien son varios países latinoamericanos que registran caídas en sus economías, no hay que olvidar que la Argentina viene sosteniendo varios trimestres en caída de su actividad debido a la crisis económica generada bajo el anterior gobierno de Mauricio Macri, por lo tanto, al arribo de la pandemia en marzo hay que sumarle la crisis económica que el país viene arrastrando a la hora de hacer el análisis de la caída de actividad del país. De todas formas, y como en los otros dos continentes analizados, el virus no hará excepciones: las proyecciones del FMI para todos los países son de caída del PBI.

De las tres economías más importantes de Latinoamérica el derrumbe más importante se produciría en México (-10,5%), seguido por Argentina (9,9%) y Brasil (-9,1%). A estos países los siguen las retracciones de Ecuador (-6,5%), Perú y Chile (4,5%) y Uruguay (-3%). Los países al norte de la línea del Ecuador correrán la misma suerte, Estados Unidos registraría una retracción del -8% y Canadá del 8,4%.

En resumidas cuentas, lo que nos muestra el Cuadro 1 es que la pandemia provocada por el nuevo Coronavirus está generando una crisis económica a nivel mundial de magnitudes pocas veces vistas y, frente a esto, los gobiernos tienen la opción de mitigar el impacto económico en la mayor medida posible con políticas monetarias y fiscales para sostener la economía, pero también el objetivo de salvar la mayor cantidad de vidas posibles.

Es en este punto donde el Cuadro 1 muestra las conclusiones más importantes: si bien los datos reflejan caídas en la actividad actual o proyecciones de caída de la economía de manera similar para todos, donde sí existen diferencias es en la incidencia de fatalidad ajustada por millón de habitantes en cada país.

Del listado de países seleccionados, la Argentina es el quinto país con menos muertos por cada millón de habitantes (25). El podio lo componen China (3 por cada millón), Corea del Sur (5), Uruguay (7) y en cuarto lugar Japón (8).Esto demuestra que la crisis económica es inevitable, la catástrofe sanitaria no.

Retrocesos de dos dígitos en la producción industrial

Para el mismo panel de países seleccionados hemos recopilado la evolución industrial al mes de abril. Para realizar el análisis recopilamos la evolución del índice de producción manufacturera de cada paíscon respecto al mes anterior, el último dato disponible es el de abril. Canadá, México, Bolivia y Japón son los únicos países que no cuenta con ese dato.

Como se desprende del Cuadro 2, a excepción de Corea del Sur y China, absolutamente todos los países seleccionados sufrieron un desplome de su producción industrial en el mes de abril ya con el arribo de la pandemia instalado a lo largo y ancho del mundo. Nuevamente repetimos, se trata de países que han adoptado medidas sanitarias más o menos flexibles, restricciones tardías o tempranas, sino que existe un crisol de medidas sanitarias distintas adoptadas por los diferentes países, pero el denominador común para la economía es el mismo: crisis y paralización de la producción.

Se puede observar que la caída de la producción en los países europeos es de una magnitud relevante, todos por encima del 20%, encabezados por Italia (-29,2%) y Alemania (-22,6). En Estados Unidos, la producción industrial en abril cayó un 11,3%.

Los países latinoamericanos no escapan a esta tendencia, Argentina es el quinto país en el listado de América latina (-18,3%), Perú encabeza el listado (-27,7%) seguido por Uruguay (-21,6%) y Brasil continúa la lista (-18,8%). Detrás de Argentina solo se ubican Ecuador (-16,4%) y Chile (-6,7%). Y si establecemos un ranking con el total de países seleccionados, Argentina se encuentra en el puesto 10 de 15 países seleccionados.

Generalizada suba de la desocupación

Por otro lado, no sólo las caídas en actividad económica y en la producción industrial sobresalen para los países seleccionados de América del Norte, América Latina, Europa Occidental y Asia, sino que además se registrará en 2020 una suba de la tasa de desocupación respecto de los niveles actualmente existentes, que en muchos casos ya registran los impactos de la pandemia.

En el Cuadro 3 se observa en muchos de los países seleccionados una tasa de desocupación de dos dígitos mientras que las proyecciones del FMI, en muchos de los casos, estiman un aumento en las tasas de desocupación. En Europa, actualmente lleva la delantera España con una tasa del 14,4%, lo sigue Italia con un 9,4% y Francia (7,8%). Con tasas de desocupación menores se encuentran Alemania (4,3%) y el Reino Unido (4,8%). En el continente americano Estados Unidos registra tasas de desocupación históricamente altas (13,3%) y Canadá no se queda atrás registrando una tasa del 13,8%. América Latina está en un escenario similar donde hay varios países con una tasa de desocupación que llega a los dos dígitos. El podio lo componen Colombia (19,8%), Perú (13,1%) y Brasil (12,2%). La Argentina se encuentra actualmente con una tasa del 10,4%. Recordemos que nuestro país viene registrando aumentos en la tasa de desocupación producto de la crisis de los últimos años bajo el gobierno de Mauricio Macri, donde la tasa de desocupación de diciembre de 2019 había sido superior al 9%, por lo cual se registra un leve incremento. Uruguay registra una tasa de desocupación similar a la Argentina del 10,1% y el resto de los países seleccionados registran tasas de un dígito. Los países asiáticos (China, Corea y Japón) registran también tasas de un dígito, no teniendo variaciones relevantes con la estimación proyectada del FMI para fin de año.

En suma, el Cuadro 3 arroja la contracara del impacto económico que tiene la pandemia en la economía: el desempleo. La gran mayoría de los países registra un incremento en sus tasas de desocupación y el FMI estima que, en su mayoría se mantendrán estables en los niveles actuales durante todo el año. Esto con excepción de algunos países donde, se estima, la tasa de desempleo se disparará aún más como por ejemplo España (17,5%), Italia (12%), Francia (10,4%) y Brasil (14,7%).

A continuación se reconstruye la evolución reciente de la serie de desocupación en países seleccionados. Se observa que la pandemia produjo un aumento sensible de la desocupación en todos casos, a excepción de Europa, donde los subsidios a las y los trabajadores generan desincentivo de búsqueda de trabajo por lo que quedan en condición de inactivos durante la pandemia y durante el tiempo que se extiendan los subsidios. Europa está debatiendo su eliminación a finales de agosto.

En Estados Unidos la tasa de desocupación se encontraba en 4% en junio 2019 y asciende, un año más tarde a 11%. En el caso de Canadá la curva es similar: de 5% de desempleo en junio 2019, la suba llega a 14% para el mes de mayo (gráfico 1).

En este Gráfico 2 vemos que en Europa el desempleo se mantiene estable, con gran participación de los seguros de desempleo para evitar un salto. En el Gráfico 3, los países Perú, Chile y Colombia tienen importantes subas de desempleo asociadas al impacto de la pandemia. En Chile el ascenso en el último año es de 7% a 11%, en Colombia de 10% a 21% y en Perú de 7% a 13%.

Por último, en el Gráfico 4 se observa la evolución del desempleo en las dos principales economías del Cono Sur, Brasil y Argentina. En ambos países se registran subas de este indicador en los gobiernos precedentes, en Brasil luego de los gobiernos de Temer y de Bolsonaro y en Argentina a partir del gobierno de Mauricio Macri, que partió de 5,7% de desempleo en 2015 y terminó su mandato con cerca de 10%.

Con la pandemia, en Brasil la tasa de desocupación ha subido en el último año 1 punto más: de 12% a 13% y en Argentina por el momento se mantiene estable en 10%, pero las estimaciones privadas indican que la suba podría adicionar cerca de 5 puntos porcentuales más en los principales aglomerados urbanos del AMBA.

La evolución de la movilidad de las personas en cada país

Según los datos que permite reconstruir Google sobre la movilidad de la personas, al 23 de junio Argentina registraba un 29% menos de  movilidad que durante el verano –pre cuarentena-, línea de base construida entre el 3 de enero y el 6 de febrero de 2020. La medición promedio se basa en la movilidad registrada en los siguientes sectores: retail y recreación, supermercados y farmacia, transporte público, lugar de trabajo y sector residencial.

Al observar la evolución de esta misma variable promedio en otros países latinoamericanos, vemos que Argentina no es el país con mayores restricciones a la movilidad, siendo que Chile presenta una reducción del 40% respecto del mismo periodo enero-febrero, Perú del 37% y Bolivia del 32%. Países con la misma caída en el indicadores de movilidad como Argentina son México (28%) y Colombia (-27%). Los datos se presentan en el Gráfico 5 debajo.

En todos los casos se trata de países con mayor cantidad de muertes por millón de habitantes respecto de Argentina (ver Cuadro 1).


2. Ningún país se salva de la crisis económica

Asia, el primer impacto

El país que más sufrió esta caída durante los primeros tres meses del año ha sido China: su producción interna nacional se contrajo un 6,8% en comparación con el primer trimestre del 2019, según la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE). Fue el primer revés económico desde 1976 y un golpe importante para un país que venía logrando tasas de crecimiento exponenciales. En los primeros tres meses del año el PBI chino alcanzó los 2.916 millones de dólares. Esta importante caída, la más grande del mundo para este período, se debió a dos importantes factores: por un lado el país asiático fue el origen de la pandemia, lo cual generó un impacto más temprano y más fuerte; y, por el otro, las medidas de confinamiento social tomadas para intentar mitigar el impacto sanitario, que incluyó una cuarentena total en Wuhan -una ciudad de 11 millones de habitantes- y restricciones en la propia capital. La caída del PBI repercutió, a su vez, en la caída de la producción industrial del país: -13,5% en el primer bimestre del año en relación al 2019, según datos recogidos por el Centro de Estudios para la Producción del Ministerio de Desarrollo Productivo[1].

La caída del PBI chino se tradujo, a su vez, en el crecimiento histórico del desempleo: en febrero llegó al 6,2%, más de 27 millones de personas. Para abril la economía había dado señales de recuperación, lo que indica que tendrá una recuperación más rápida que el resto del mundo por haber sido el primer país en haber controlado la enfermedad. De todas maneras, todavía se esperan resultados negativos para los próximos meses hasta lograr la recuperación.

El impacto económico en Asia también golpeó a Japón, la tercera economía del mundo. Entre enero y marzo del 2020 su economía se contrajo un 1,9% de forma interanual. De esta manera, entró en recesión por primera vez desde el año 2015 tras dos contracciones económicas seguidas: 1,9% entre octubre y diciembre del 2019 y un 0,9% a comienzos de este año. Además, la pandemia profundizó la mala situación económica arrastrada durante todo el año pasado y provocó una fuerte caída de la industria del 14,5% en abril y un desempleo del 2,6% para el mismo mes. 

Al mismo tiempo, la India representa un caso particular en estos momentos. Durante los primeros tres meses del 2020 su economía logró crecer un 3,1% de forma interanual, pero a pesar de esto su crecimiento del año fiscal -de abril a marzo- fue del 4,2%, su nivel más bajo desde la crisis económica del 2008. La desaceleración económica encuentra sus orígenes, al igual que Japón, en momentos previos a la pandemia, pero las medidas para enfrentar a la enfermedad profundizan la crisis. Además, según los datos recolectados por el Ministerio de Desarrollo Productivo en abril su industria sufrió una fuerte caída interanual del 64,3%.

Europa, el segundo impacto

El segundo continente en sufrir el mayor golpe sanitario y económico de la pandemia fue Europa, con los principales focos de contagio en Italia, Francia, España y el Reino Unido. Los resultados negativos se expandieron por el bloque comunitario de la Unión Europea y también entre aquellos Estados que no forman parte de Mercado Común europeo.

Italia registró el peor resultado económico durante los primeros tres meses del año en el continente. Su contracción fue del 5,4% en comparación con el primer trimestre del 2019 e ingresó, al igual que Japón, en recesión tras una caída del 0,3% en el último período del año pasado. El impacto de la pandemia se evidencia en el hecho de que la caída entre enero y marzo fue la más importante desde que el Instituto Nacional de Estadísticas (Istat) comenzó a registrar datos en el año 1995. La pandemia también ha repercutido de forma negativa en su producción industrial ya que la mayoría de los casos y muertos se registraron en el Norte, donde radican la mayor cantidad y las más importantes fábricas del país. En abril, Italia registró una caída industrial interanual del 42,5% y según la Agencia Nacional de Políticas Activas de Empleo (Anpal) el país perderá medio millón de puestos de trabajos y deberá esperar hasta el 2023 para volver a las tasas laborales previas a la pandemia.

La segunda economía del continente, Francia, también sufrió el segundo impacto más grave por la crisis. Entre enero y marzo del 2020 sufrió una caída del 5,3% de su PBI de forma interanual y, al igual que Italia, ingresó en recesión tras haber sufrido una caída del 0,1% durante los últimos tres meses del 2019. “El país va a tener que luchar contra una recesión histórica”, dijo su Primer Ministro, Edouard Philippe. Estos números negativos sólo encuentran un antecedente de semejante magnitud en el Mayo Francés, de 1968, cuando la economía se contrajo un 5,3% en el segundo trimestre del año.

España fue uno de los países más golpeados a nivel sanitario por la pandemia y, también, uno de los que más sufrirá económicamente. En el primer trimestre del 2020 su PBI cayó un 4,1% de forma interanual, menos de lo esperado por las estimaciones oficiales. De esta manera, no logró superar la mayor caída de la historia, registrada en el segundo trimestre del 2009, cuando cayó un 4,4% de forma interanual. A pesar de esto, se esperan peores resultados en los próximos trimestres.

Asimismo, estos últimos dos países también registraron récords negativos en el desempleo nacional. En el mes de marzo Francia registró un aumento récord de la desocupación del 7,1% en relación a febrero, es decir, 246.100 personas, pero durante el primer trimestre el desempleo sólo aumentó un 0,7% ya que hubo una importante reducción en los primeros dos meses del año. A pesar de esto, el Palacio de Elíseo espera resultados aún peores para los próximos meses al tener en cuenta la continuidad en el tiempo de la pandemia. Por su parte, en España el desempleo alcanzó a 3,3 millones de personas tras aumentar del 13,8% al 14,4% en el primer trimestre del año[2].

Reino Unidoes, por su parte, el ejemplo quedemuestra que el impacto económico de la pandemia afecta tanto a aquellos países que tomaron medidas de confinamiento nacional o regional, como España, Italia y China, como a aquellos que no las han tomado, Inglaterra por caso. El Primer Ministro, Boris Johnson, decidió no aplicar una cuarentena nacional, y sólo cambió de estrategia cuando él mismo se enfermó del nuevo tipo de Coronavirus.

Según los números de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS), en el primer trimestre del 2020 la economía inglesa se contrajo un 1,6% de forma interanual, la caída más grande desde el cuarto trimestre del 2009. A pesar de haber optado por mantener la economía abierta el mayor tiempo posible, el Ministro de Economía, Rishi Sunak, aseguró que es “muy probable” que el país sufra una “recesión significativa” durante este año. Además, según ONS entre marzo y mayo, período en el que se aplicaron medidas de confinamiento, el reino perdió 600 mil trabajos y según el CEPXXI su industria cayó un 28,5% de forma interanual en abril.

Por su parte, Alemania también registró un resultado negativo durante el primer período del año. De forma interanual cayó un 2,3%, la caída más grave desde el segundo trimestre del 2009, como se evidenció en el Reino Unido. Esta pequeña comparación permite observar que la pandemia ha impactado de manera similar en dos países que han tomado medidas de confinamiento y distanciamiento social diferentes. Mientras Alemania destinó una mayor preocupación a este aspecto y prohibió reuniones y ciertas actividades económicas, Londres optó por mantener la economía abierta el mayor tiempo posible. A pesar de esto, el impacto económico ha sido similar, lo que demuestra que la crisis es producto de la pandemia y no de las cuarentenas. Berlín también registró una fuerte caída industrial interanual en abril, 31,2% según CEPXXI, y la Oficina Federal de Empleo (BA) informó que para fines de mayo el desempleo había aumentado hasta el 6,1% con una pérdida de casi medio millón de puestos entre abril y mayo y registró, de esta manera, su primera contracción interanual desde el 2010.

América, tercer impacto

En el continente americano, Estados Unidos ha sido el país que más ha sufrido el impacto sanitario de la pandemia a tal punto que es el Estado con más casos y más muertos de todo el mundo. La decisión de Donald Trump de mantener la economía abierta porque su cierre “puede causar más muertes que el coronavirus”[3] no ha evitado la peor crisis económica nacional desde 1930. A nivel interanual en los primeros tres meses del 2020 el PBI se desplomó un 5%, el nivel más alto desde el cuarto trimestre del 2008, cuando cayó un 8,4%. De esta mantera el país cortó su período de expansión económica más largo de la historia, ya que en julio del 2019 había logrado 120 meses de crecimiento constante e ininterrumpido.

La crisis económica de Washington se evidenció en el crecimiento exponencial del desempleo, al igual que en China. El Departamento del Trabajo informó que entre marzo y abril la tasa de desocupación trepó del 4,4% hasta 14,4%, una cifra récord que no se registraba desde la Gran Depresión de 1930. Casi 40 millones de puestos de trabajo se perdieron a pesar de haber mantenido la economía abierta a nivel nacional. En octubre del 2019 el país logró el pleno empleo con apenas un 3,5% de desempleados, el nivel más bajo en 50 años, y en abril llegó a la tasa más alta de desempleados en 90 años.

Los países limítrofes de Estados Unidos, México y Canadá, también reportaron registros negativos durante los primeros tres meses del año. La economía mexicana se contrajo un 2,4%, el número más grande desde el último trimestre del 2009. Al mismo tiempo, la economía de Ottawa se contrajo un 2,1% de forma anual y registró una caída récord en la historia reciente del 7,2% en marzo. Además, la oficina de Estadísticas de Canadá (EC) informó que tres millones de puestos de trabajo se perdieron entre marzo y abril y que el desempleo trepó hasta el 13%, un registro que “no tienen precedentes” y que “ampliamente sobrepasa las observadas en otras crisis”, según el órgano oficial. Por su parte, el subgobernador del Banco de México, Jonathan Heat[4], informó que el país espera que el desempleo aumente hasta el 10,7% durante este 2020 y alertó que se puede “alcanzar y sobrepasar” el pico de 10,7% de la crisis de 1995.

El segundo país del mundo con más casos y muertos por el Covid-19 es Brasil, pero, a diferencia de los Estados Unidos, el impacto económico no se evidenció en los primeros tres meses del año porque las primeras medidas para controlar la enfermedad, que de todas maneras no incluyeron una cuarentena nacional, se tomaron a fines de marzo. En una comparación interanual la economía se contrajo un 0,3% y en relación al último trimestre del 2019 la contracción fue del 1,5%. Es por esto que los peores registros se esperan para los próximos meses. A pesar de esto, el Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE) registró una caída de la producción industrial del 29,6% en abril y una tasa de desempleo del 12,6% a fines del primer trimestre, un aumento del 1,4% en relación al último trimestre del 2019. En total se perdieron 898.000 puestos de trabajo y el desempleo afecta a 12,8 millones de personas.

En América del Sur uno de los países que más sufrió a nivel económico por la pandemia ha sido Perú. Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) en los primeros tres meses del año el PBI cayó un 3,4% en relación al mismo período del año pasado y cortó, de esta manera, 42 trimestres seguidos de crecimiento constante. Además, la actividad económica se contrajo a una tasa récord del 40,49% en abril y en marzo la producción industrial se desplomó un 32,2% de forma interanual. Asimismo, el INEI informó que el desempleo casi se duplicó y llegó al 31,1% y que sólo en Lima, la capital nacional, se perdieron 2,3 millones de puestos entre marzo y mayo. El presidente, Martín Vizcarra, alertó que el país andino sufrirá “la peor crisis económica de su historia”[5].


3. Conclusiones

La sensible caída de la actividad económica e industrial en prácticamente todos los países  del mundo resulta el mejor ejemplo del impacto económico de la pandemia, más allá de las medidas restrictivas impulsadas en cada lugar.

Las medidas sanitarias impuestas por los gobiernos de los diferentes países han sido muy distintas en duración e intensidad, pero la crisis económica es común a todos.

En este sentido, el reclamo de determinados sectores a las cuarentenas establecidas y el reclamo de “reglas claras” y propuestas económicas para los próximos meses, choca de frente con el efecto negativo de la pandemia tanto en países con mayor apertura como con menor apertura económica. Asimismo, el incremento constante de casos de contagios y el  actual rebrote del COVID-19 en diversos países profundiza la incertidumbre sobre el futuro.

A continuación mostramos la diversidad de medidas de aislamiento aplicadas en países seleccionados:

  • En España se decretó el estado de alarma nacional y cuarentena, cuando el número de fallecidos ya era alarmante, a partir del 14 de marzo. La cuarentena fue estricta hasta el 4 de mayo donde se inició un proceso de fases (similar al argentino) para que los diferentes territorios del país puedan, de acuerdo a su grado de compromiso con la enfermedad, ir pasando progresivamente de fase hasta llegar a la nueva normalidad. A partir del 20 de junio la gran parte del país se encuentra fase 3, una minoría en fase 2 y solo una porción menor del país europeo se encuentra en la nueva normalidad. Este 2020 según el FMI el PBI español caerá -12,8%.
  • El gobierno alemán impuso una cuarentena que duró poco más de un mes y a partir de mayo comenzó la apertura progresiva y actualmente se encuentra cursando la nueva normalidad. Su PBI se estima que caerá -7,8%.
  • En Francia, luego de imponer la cuarentena estricta como principal medida sanitaria el pasado 17 de marzo, el gobierno de Emmanuel Macron dispuso la reapertura y la salida progresiva de la cuarentena a partir de mediados de mayo. La actividad se contraerá -12,5% según el FMI.
  • El gobierno italiano decretó la cuarentena el 10 de marzo, la cual duró aproximadamente dos meses y a mediados de mayo se comenzó la progresiva apertura que dio inicio a la salida de la cuarentena. La caída del producto será de -12,8%.
  • En Reino Unido, el gobierno de Boris Johnson, a pesar de algunas reticencias iniciales, y con el virus circulando ya hace más de un mes en su país, impuso la cuarentena obligatoria en todo el territorio nacional a fines de marzo, la cual duró aproximadamente dos meses cuando, a mediados de mayo, se comenzó la reapertura progresiva. El PBI caerá -10,2% en 2020.
  • Los países asiáticos fueron los primeros en imponer medidas estrictas de confinamiento con una gran capacidad de poner freno a la circulación del virus. Entre ellos sobresale el caso chino que impuso medidas tales como cerrar Wuhan (lugar del inicio de la pandemia) y otras ciudades (no fue una cuarentena nacional, sino regional), acompañada con disposiciones de seguimiento de casos estrechos con casos confirmados. La cuarentena con alcance regional de todas maneras cubrió a un universo de casi 70 millones de personas. Rigió desde enero y recién en el mes de abril comenzó la fase de flexibilización.China sería uno de los pocos países con crecimiento económico, de 1% en 2020.
  • Estados Unidoses el ejemplo de no haber adoptado medidas sanitarias de confinamiento estricto para combatir el Covid-19, sufriendo hoy en día las consecuencias de esta estrategia. La caída de la actividad sería de -8%.
  • En México el gobierno de López Obrador dispuso la cuarentena obligatoria a partir del 20 de marzo y el pasado 1 de junio comenzó a iniciar la transición hacia la nueva normalidad con distinta gradualidad en los diferentes estados. El retroceso será de -10,5%.
  • El gobierno chileno decretó un confinamiento social en la Región Metropolitana de Santiago (RMS) y algunas ciudades del Norte. En total abarcó a cerca del 50% de la población. La cuarentena fue obligatoria a partir del 18 de marzo y sigue vigente. La caída será de -7,5%.
  • Al igual que México, la Argentina dispuso el confinamiento obligatorio en todo el territorio nacional a partir del 20 de marzo, el cual sigue vigente en una fase estricta en el territorio del AMBA, mientras el 85% de país se encuentra retomando la nueva normalidad. La contracción del PBI sería de -9,9%.

Los impactos de la pandemia no sólo se registran en el PBI estimado a 2020:

  • Ya se registran retrocesos de la producción industrial de dos dígitos. La caída de la producción en los países europeos es de una magnitud relevante, todos por encima del 20% en el mes de abril 2020 respecto de marzo, encabezados por Italia (-29,2%) y Alemania (-22,6). En Estados Unidos, la producción industrial en abril cayó un 11,3%.
  • Los países latinoamericanos no escapan a esta tendencia, en los datos de abril Argentina es el quinto país en el listado de América latina (-18,3%), Perú encabeza el listado (-27,7%) seguido por Uruguay (-21,6%) y Brasil continúa la lista (-18,8%). Detrás de Argentina solo se ubican Ecuador (-16,4%) y Chile (-6,7%). Y si establecemos un ranking con el total de países seleccionados para este informe, Argentina se encuentra en el puesto 10 de 15 países seleccionados.
  • Se observa además que la pandemia produjo un aumento sensible de la desocupación en todos casos, a excepción de Europa, donde los subsidios a las y los trabajadores generan desincentivo de búsqueda de trabajo por lo que quedan en condición de inactivos durante la pandemia y durante el tiempo que se extiendan los subsidios. Europa está debatiendo su eliminación a finales de agosto.
  • En Estados Unidos la tasa de desocupación se encontraba en 4% en junio 2019 y asciende, un año más tarde a 11%. En el caso de Canadá la curva es similar: de 5% de desempleo en junio 2019, la suba llega a 14% para el mes de mayo.
  • Perú, Chile y Colombia tienen importantes subas de desempleo asociadas al impacto de la pandemia. En Chile el ascenso en el último año es de 7% a 11%, en Colombia de 10% a 21% y en Perú de 7% a 13%.
  • En Brasil la tasa de desocupación ha subido en el último año 1 punto más: de 12% a 13% y en Argentina por el momento se mantiene estable en 10%, pero las estimaciones privadas indican que la suba podría adicionar cerca de 5 puntos porcentuales en los principales aglomerados urbanos del AMBA.
  • Cabe decir que en Argentina la fuerte suba de la desocupación ocurrió en el periodo precedente (al igual que en Brasil, bajo los gobiernos de Michel Temer y Jair Bolsonaro). El gobierno de Mauricio Macri partió de 5,7% de desempleo a fin de 2015 y terminó su mandato con cerca de 10%. La pandemia comienza en ese complejo punto de partida.

¿Argentina es el país con la cuarentena más estricta?

Suele argumentarse que Argentina tiene medidas más estrictas que otros países y los datos que relevan desde Google Community Mobility Reports dicen lo contrario:

  • Al 23 de junio Argentina registraba 29% menor movilidad que durante el verano –pre cuarentena-, línea de base construida entre el 3 de enero y el 6 de febrero de 2020.
  • Chile presenta una reducción del 40% respecto del mismo periodo enero-febrero.
  • Perú redujo su circulación en 37% en igual periodo y Bolivia en 32%.
  • Países con la misma caída en el indicadores de movilidad como Argentina son México (28%) y Colombia (-27%).
  • En todos los casos citados se trata de países con mayor cantidad de muertes por millón de habitantes respecto de Argentina.

Este breve repaso por las medidas sanitarias desarrolladas por cada país nos sirve para ilustrar que los gobiernos impusieron diferentes medidas en términos de flexibilidad y plazos, pero la crisis económica es común a todos, lo cual afirma la idea de que la crisis económica que se vive es generada por la pandemia y no por las medidas sanitarias impuestas. Poniéndolo de manera sencilla: la pandemia del nuevo Coronavirus genera crisis económica, las medidas de aislamiento salvan vidas.


Autores

Hernán Letcher, Julia Strada, Lucio Garriga, Cecilia Llabres y Luciano Foggia.


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